El Presidente de la Diputación rinde homenaje a Miguel Ángel Blanco en el 27 aniversario de su asesinato
El Ayuntamiento de Ciudad Real ha organizado y celebrado un acto en memoria del concejal de Ermua víctima de ETA.
El presidente de la Diputación de Ciudad Real, Miguel Ángel Valverde Menchero, ha participado a última hora de esta mañana en el acto que ha organizado y celebrado el Ayuntamiento de la capital en memoria de Miguel Ángel Blanco, el concejal de Ermua que fue asesinado hace hoy 27 años por miembros de la banda terrorista ETA.
Valverde ha dado lectura, junto al fiscal-jefe de la Audiencia Provincial, Miguel Ángel Carballo, quien precisamente ejerció la Acusación Pública durante el juicio que tuvo lugar en la Audiencia Nacional, al manifiesto que ha difundido la Fundación Miguel Ángel Blanco, constituida en diciembre de 1997 con el objetivo de que no cayera en el olvido este execrable crimen.
Antes de proceder a la lectura el presidente de la Diputación ha recordado la experiencia que vivió el 12 de julio de 1997. “Recuerdo muy claramente esos momentos tan duros, tan tensos y como la sociedad en su conjunto se manifestó con rabia, pero también con serenidad y dignidad, en contra de lo que estaba sucediendo”, ha dicho.
Por su parte, el alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, ha sido el encargado de recordar lo que supuso para todo el país el asesinato de Miguel Ángel Blanco y cómo los españoles pidieron su libertad saliendo a la calle, pero lamentablemente los acontecimientos no se sucedieron como todos deseaban.
Al homenaje, celebrado en las instalaciones del antiguo casino de Ciudad Real, han asistido autoridades locales, provinciales, regionales y nacionales, así como representantes del Ejército y de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, entre otros. El presidente de la Diputación ha estado acompañado por la portavoz del Gobierno de la institución provincial, Rocío Zarco, y por el vicepresidente cuarto, Adrián Fernández. Todos ellos han depositado flores blancas a los pies de una imagen de Miguel Ángel Blanco que ha distribuido la fundación que lleva su nombre.
El manifiesto
Valverde y Carballo han dado lectura al manifiesto que sigue a continuación:
En el recuerdo imborrable de Miguel Ángel Blanco, carta abierta a tu Memoria
Hace 27 años millones de españoles salimos a las calles para exigir a ETA que no acabara con tu vida. Un 10 de julio te secuestraron y un 12 te asesinaron. Sin la más mínima piedad, desoyendo un clamor popular que atravesó toda la sociedad y movilizó las conciencias de los ciudadanos. No pudimos salvar tu vida, pero mantuvimos la dignidad y la rebeldía cívica más allá del miedo o la apatía.
Llevaban décadas amargándonos la convivencia, hasta tu secuestro ETA había asesinado a 777 inocentes: policías, guardias civiles, militares, jueces, políticos constitucionalistas, periodistas valientes, ciudadanos de toda condición que tenían derecho a vivir y que la banda convirtió en enemigos de su fanatismo identitario, por lo que representaban: la libertad, la pluralidad política, el estado de derecho español. Tú fuiste la víctima 778, una fría cifra, que corresponde a un joven de 29 años bueno y comprometido con su tiempo y su sociedad, un ciudadano valiente que defendía sus ideas sin complejos. ETA te eligió por su cobardía y su odio, no podía permitir que hubiera vascos que se sintieran también españoles y con su compromiso se enfrentaran al totalitarismo terrorista.
Miguel Ángel, tu legado es muy importante: la tortura a cámara lenta a la que te sometió ETA hizo comprender a la inmensa mayoría social que el terrorismo era profundamente dañino, no sólo para sus víctimas sino para toda la sociedad. Que había que responder ante tanto horror e intimidación acumulados, que había que exigir la aplicación de la ley, sólo la ley, pero toda la ley.
Sin que lo buscaras tu mirada melancólica, se convirtió en la mirada inocente de todas las víctimas del terrorismo. Aquellos días de julio de 1997 que conmemoramos han construido la conciencia colectiva de una generación, es una obligación moral no pervertirla ni ocultarla. La respuesta social a tu martirio fue ejemplar: nos mantuvimos unidos, firmes, convencidos de que había que parar a ETA y también a sus cómplices, que debíamos protegernos ante tanta humillación y crueldad sin límites. Que debíamos marcar una línea roja aislando al entramado social y político de ETA. En tu recuerdo, que aún perdura en millones de españoles con edad suficiente, se sintetiza el dolor producido por el terrorismo, por todos los terrorismos que ha sufrido España. En tu reivindicación y significación social lo mejor que hemos construido para acabar con la lacra del terrorismo y que se llamó Espíritu de Ermua. Por fin las víctimas del terrorismo conquistaron el lugar que a todas corresponde: el de la centralidad, el de su verdad que reclama justicia, el de su dignidad que los terroristas manipularon vilmente por intereses extremistas.
En aquellos días miles de ciudadanos escribieron cartas dirigidas a tu familia que mostraban solidaridad, rabia, rebeldía, empatía, compasión, hartazgo, impotencia. Y escribieron sobre tu rostro en las imágenes que los vecinos de Ermua pusieron de tu cara en las calles del municipio. Una persona escribió como se puede ver en el cartel de la campaña: ¡Tú y todos! Esto es lo que queremos reivindicar y transmitir a los jóvenes este aniversario: que cada víctima de la barbarie terrorista, cada acción terrorista, cada humillación, cada ofensa ha sido absolutamente injusta y nunca tendría que haberse producido. Que la realidad de las víctimas, las
consecuencias del terror son imborrables y no pueden ser blanqueadas, ni relativizadas. Que todas las víctimas son referentes de comportamiento social ejemplar, la antítesis de sus asesinos y cómplices. Que el relato final, todavía hoy sin construir, tiene que basarse en una Memoria ligada a la Justicia. No vamos a admitir el olvido y la impunidad, se lo debemos a las víctimas del terrorismo y a la calidad de nuestra democracia.
Hemos conseguido derrotar policialmente a ETA, gracias, principalmente, a la profesionalidad y sacrificio de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Pero no hemos conseguido que triunfe un relato inequívoco de derrota social y política de tantos años de terrorismo: En 2024, 27 años después, sigue habiendo legitimación del terrorismo en el País Vasco y Navarra, siguen organizándose homenajes a terroristas, existe una gran impunidad: más de 300 asesinatos siguen sin resolverse. Las marcas políticas herederas de ETA siguen sin condenar tu asesinato ni ningún otro y tienen más poder que nunca en un proceso de blanqueamiento y olvido sobre décadas de complicidad con el terrorismo. Seguiremos rebelándonos ante este estado de cosas.
Creemos y defendemos una Memoria ligada a la Justicia y nos comprometemos con los valores que representan las víctimas del terrorismo y que son principios éticos y políticos que deben cimentar democracia constitucional. No podemos hurtar a las nuevas generaciones esta parte de su historia reciente.
Gracias Miguel Ángel, a ti y a todas las víctimas que sois referentes sociales, vuestro reconocimiento y homenaje permanentes nos hace mejores individual y colectivamente. Es nuestra responsabilidad defender, preservar y transmitir vuestra Memoria.
¡TU Y TODOS!