
Éxito total en la carrera Don Bosco
Viendo la película “Carros de Fuego” comprobamos como el deporte genera hermosos lazos de fraternidad, nos ayuda a crecer como personas y fomenta el compañerismo. Y como no, la solidaridad. Supone dar lo mejor de nosotros mismos siendo solidarios con los más desfavorecidos. Así crecemos, nuestro tono muscular y nuestra frecuencia cardiaca se engrandece. En este mundo que está dando tantos admirables ejemplos de solidaridad entre seres humanos y a la vez de deplorable falta de solidaridad.
Pero nosotros somos solidarios. Hoy, Valdepeñas corre en solidaridad con tantas familias que en estos tiempos son duramente azotados. Corremos unidos. No huimos, corremos hacia la meta de la esperanza; hacia aquellos que se sienten solos y en una difícil situación. Gracias a todos aquellos –cerca de cuatrocientos- que incluso aun viviendo a su vez una situación no especialmente desahogada han querido ayudar a otras personas más desfavorecidas, derramando luz en tiempos de desesperanza. Esa es la verdadera receta de la felicidad evangélica. No hay mejor manera de celebrar a San Juan Bosco.
Mil gracias a todos y a todas las participantes por ver la vida de otra manera.