
Encierro infantil de San Fermín
Gran acogida al encierro infantil de San Fermín en Manzanares
Los niños y niñas de Manzanares disfrutaron del encierro infantil de San Fermín, el cual les causó gran alegría, y luego se divirtieron con castillos acuáticos y una fiesta de la espuma.
Además de las actividades y el espectáculo del jueves, la Feria y Fiestas 2023 tenía planeada mayor diversión para los infantes de Manzanares. Los pequeños tuvieron la oportunidad de participar en el encierro de San Fermín diseñado para ellos, y después, cerrar la mañana refrescándose en los dos inflables de agua y en la celebración de espuma.
El viernes tuvo lugar el último encierro oficial de San Fermín 2023, pero en Manzanares se celebró el domingo uno muy especial como parte de la programación de la Feria y Fiestas 2023: el encierro infantil. Esta actividad volvió a deleitar tanto a adultos como a niños. Muchas personas asistieron al evento luciendo el atuendo ‘reglamentario’: pantalón y camiseta blancos, fajín y pañuelo rojo, y un periódico en la mano. Aunque lo más importante no era la ropa, sino tener una mañana inolvidable corriendo delante de Bribón, Amoroso, Bailón y Furioso.
Esos fueron los cuatro toros amistosos que protagonizó el encierro. Cada uno contaba con su propia personalidad, pero todos compartían el amor que sentían hacia los niños y niñas. Por lo tanto, además de poner a prueba su rapidez y darles algún que otro toque de manera afectuosa, los cuatro astados aceptaron ser acariciados y fotografiados por todos. Puesto que lo que caracterizó este encierro infantil fue el mensaje en contra del maltrato animal que fue transmitido por Atlas Eventos.
Al término de la carrera por la calle Empedrada, se concluyó el encierro en una plaza de toros improvisada instalada en la plaza de la Constitución. En ese lugar se realizaron recortes, se produjeron más golpes y se vivió una gran aclamación hacia los cuatro toros.
Castillos acuáticos y fiesta de la espuma
Una vez devueltos los toros a los corrales, prosiguió la jornada con los inflables colocados en la misma Plaza de la Constitución. Unos castillos de agua que propiciaron experimentar sensaciones intensas a los niños y, al mismo tiempo, refrescarles ante el sofocante calor matinal, a lo cual también colaboró la celebración de la espuma en la que participaron los grupos familiares completos.