Una ponencia en la UNED analiza las amenazas reales del uso de las armas químicas en las guerras
“Armis bella non venenis geri” (La guerra se hace con las armas, no con venenos) reza el adagio romano. Una máxima que aunque cargada de honor y buenas intenciones no ha dejado de incumplirse desde el comienzo de la humanidad hasta nuestros días.
Con estas categóricas afirmaciones, Fernando Villena Sánchez, Licenciado en Derecho y diplomático de carrera, ha puesto de manifiesto el riesgo al que nos enfrentamos con respecto a las armas químicas y qué se puede hacer para evitarlo, en la conferencia “Las armas químicas: desafíos jurídicos y militares”, impartida en la UNED de Ciudad Real.
En su intervención, este diplomático y analista ha hecho un breve recorrido histórico basado en las referencias al uso de venenos, compuestos químico, etc. que desde la Antigüedad hasta el momento actual, como ha sucedido en Siria, se han utilizado en conflictos bélicos. Como ha argumentado, la Iª Guerra Mundial marca un punto de inflexión en el uso a gran escala de armas químicas, reaccionando la comunidad internacional con rechazo total, indignación y repugnancia ante estos hechos.
Las armas químicas siempre han gozado de un atractivo que seduce a estados y a guerrilleros, criminales, grupos armados y terroristas. Tras la Iª Guerra mundial, se inició la andadura hacia la prohibición de su uso y para su destrucción. Y aun así, algunos estados consideraron, y aún consideran, que si no pueden tener armas nucleares, sí que tendrán la llamada “arma atómica de los pobres”.
El marco conflictual actual, en el que el referente es el enfrentamiento asimétrico y/o el terrorismo, hacen que el arma química mantenga su vigencia como amenaza. La respuesta nacional e internacional habrá de evolucionar acorde a los tiempos. ¿Cuál es el riesgo real que supone la existencia de las armas químicas para los estados?: enorme. ¿Cuál es el riesgo de su uso para las sociedades occidentales?: escaso. ¿Podrán los regímenes internacionales vigentes afrontar este desafío?: dependerá de la vigencia del propio concepto de estado en el marco del orden internacional del siglo XXI.
En las conclusiones, Fernando Villena ha justificado que las armas químicas son una amenaza real, pero limitada, debido, en parte, al límite del esfuerzo multilateral y a la responsabilidad de los Estados.
Fernando Villena Sánchez es Diplomático. Asesor/analista en el Ministerio de Defensa. Secretaría General de Política de Defensa. Ministerio de Asuntos Exteriores / Ministerio de Defensa. Ha ejercido su labor diplomática en la Subdirección General para la No Proliferación y Desarme. Dirección General de Seguridad. Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación.
También ha realizado parte de su trabajo en el extranjero: en la Embajada de España en El Salvador, en la Embajada de España en Nicosia y en la Embajada de España en Pretoria, como Cónsul. Desde agosto de 2021 destinado como Analista/Coordinador de Área, DICOES – SEGENPOL.